El quinto encuentro solidario acabó con una cerrada ovación para todos los participantes.
El quinto encuentro solidario que enfrentó al Caja Segovia y a la Gimnástica Segoviana llevó a las gradas del pabellón Pedro Delgado a cerca de 800 personas que disfrutaron de un partido de guante blanco entre los miembros de dos equipos más representativos de la capital.
Sirva como detalle del carácter amistoso del choque el hecho de que, como en años anteriores, ambos conjuntos se vieron “reforzados” por diversos personajes tanto de la vida pública de Segovia, ya que el alcalde y el concejal de Deportes vistieron ambas elásticas a lo largo del encuentro, como por miembros cercanos a los respectivos clubes.
Así, Nacho Gonzalo y Javi Molina vinieron a reforzar el plantel de la Sego, con varias ausencias por precaución, casos de Durán, Pablo, Jesús Alonso o Víctor Pérez, entre otros. Mientras, en el Caja, con David, Kristjan y Fabián viendo el partido desde la banda, la presencia de Jesús Velasco, el utillero Pedro Pérez y el directivo Álvaro Fernández vino a paliar esas ausencias, aunque tampoco hizo mucha falta.
Aunque el resultado fue lo de menos, porque lo de más era la solidaridad con el trabajo de Cáritas, en el plano estrictamente deportivo habrá que señalar que, por aquello de que el partido era de fútbol sala, el Caja salió mejor que su rival, y en seis minutos el marcador señalaba un 3-0 demasiado esclarecedor. Como también viene siendo habitual en estos encuentros, la Segoviana fue a más mientras que el Caja lo hizo a menos, y por ello las fuerzas se igualaron hasta el punto de que el portero Gonzalo, felizmente restablecido, realizó intervenciones de mérito ante los remates de los jugadores gimnásticos.
En el descanso se llevaron a efecto los penaltis solidarios, que colocaron en el punto de penalti (y en el de mira de los aficionados) a los representantes de las instituciones públicas y patrocinadores. No se puede decir que todos marcaran desde el punto fatídico, pero su intento solidario bien mereció el aplauso del respetable.
La segunda parte llevaba los mismos derroteros que la primera, hasta que apareció el utillero de la Segoviana, “Josito”, en traje de portero para suplir a Dela bajo los palos. Con mejor humor que técnica en la portería, y con el apoyo del público, Josito consiguió dejar su portería inédita, algo que también logró Tobe, que también ejerció de portero del Caja en los últimos minutos de un partido en el que no faltó la clásica chilena de Cidao, ni el buen humor y la deportividad entre todos los protagonistas del partido, incluyendo a los árbitros Viedma y Contreras, siempre dispuestos a apoyar este tipo de causas. Un aplauso para todos ellos.
Fuente: www.eladelantado.com